lunes, 31 de octubre de 2011

GP INDIA - Cuestión de matemáticas


Mark Webber. ©L.M.Reyes.

Ya sólo restan dos grandes premios para que el gran circo cierre sus puertas por esta temporada, y tras la carrera de ayer en la India tengo una gran contradicción que machaca mi cabeza. Todo aquel que sigue de alguna forma este deporte lleva un año hablando de las excelencias del Red Bull, de lo maravilloso que es Adrian Newey, de lo mal que está Ferrari, de las proezas de Alonso por hacer podio con ese coche, o de lo fácil que lo tiene Vettel para terminar primero. Y digo yo, ¿por qué entonces no acaba segundo siempre Webber? ¿A caso es cascarilla?
Es de sobra conocido que llevar los análisis a un extremo no es bueno, y entiendo que eso es lo que está pasando este año. Si en el post de Singapur comentaba aquello de que “la noche les confunde”, refiriéndome a las desafortunadas declaraciones y reacciones de más de un piloto tras la carrera, parece que en realidad a los seguidores españoles de este gran deporte, lo que realmente les confunde son los colores rojo y azul de Ferrari y Red Bull.
Vamos por partes. Voy a lanzarles unas cuantas cuestiones con mi correspondiente análisis a continuación. Piensen cual sería su respuesta a cada pregunta, y al final, analicen si su idea de la temporada coincide con la que tenían antes de leer el post.
¿Es Webber un mal piloto? Entiendo que no. Siempre he dicho que no es un piloto top como Vettel, Hamilton o Alonso, incluso perdí una apuesta el año pasado con un amigo por colarse entre los tres primeros al final de temporada, pero de ahí a decir que es un torpe, hay mucha diferencia. De hecho llegó como favorito a la última carrera el año pasado, aunque eso no diga mucho a su favor, porque también Massa estuvo a punto de ganar un mundial en Brasil, y miren lo de ayer con Hamilton. Sigo diciendo que lo del brasileiro es para hacérselo mirar.
¿A caso en Red Bull le dan peor material que a Vettel? Indudablemente en la historia de la F-1 siempre ha habido un primer y un segundo piloto. En unos casos esto ha sido público y el propio patrón del equipo se ha encargado de promulgarlo, como en su día hizo el propio Briattore. En otros, el jefe se ha encargado de declarar justo todo lo contrario, como manifestó Horner el año pasado. Pero, eso no significa que a uno de los pilotos se le de un coche que no anda, o piezas defectuosas. Tan sólo que cuando hay una mejora, y sólo hay piezas para un monoplaza, esas deben ir para el piloto estrella, o que, cuando hay que hacer dos estrategias en carrera para minimizar daños para el equipo, el primer piloto siempre tendrá la que garantice más opciones de triunfo
Entonces, ¿por qué se encuentra cuarto en el mundial en vez de ser segundo? Esta claro que este año es el segundo piloto. Que Horner apueste por su compañero es más que lógico. Por un lado el alemán tiene 24 años, por los 35 del australiano. La apuesta de futuro no deja lugar a dudas. Además Vettel es un piloto que, en calidad, supera claramente a su rival de box. Sus poles lo demuestran.
Pero, si el coche supone un 60 o 70 por ciento de la victoria, o incluso como algunos comentaron a mi último post, un 80 por ciento, ¿por qué Webber no acaba tras Vettel con un coche tan superior? Porque ese 80% del que algunos hablaban es erróneo. La conducción del germano es la que hace grande al binomio Vettel-Red Bull. Le da un plus al conjunto que lo coloca en una órbita más lejana que lo que hace Webber. El australiano lleva este año nueve podios, los mismos que lleva Alonso con el Ferrari.
¿Quiere eso decir que el Ferrari no es tan malo? Sin duda es francamente inferior al Red Bull, pero si Alonso está por delante de Webber en la general, indica que no es tan horrible como se dice. Yo mismo he sido bastante crítico con los italianos porque van a remolque de los Red Bull e incluso de los McLaren, pero de ahí a decir esas cosas de que el coche no anda, hay mucha diferencia. El asturiano aporta también su plus como Vettel, pero si el alemán tiene el 60 o 70 por ciento del coche al máximo, en el caso de los de Maranello les falta un 10 o un 15 por ciento, y eso al final, sumado al gran estado de forma de Vettel, se traduce en los puntos que les separan en la general. Si el coche fuese tan malo, Alonso no estaría aún con opciones matemáticas al subcampeonato, porque del 30 o 40 por ciento  que depende del piloto, la diferencia entre Vettel y Alonso no llega nunca al cinco por ciento.
Y por último. Si Vettel, Hamilton y Alonso tuviesen el mismo coche, ¿quién sería el campeón? No sabría responder a esto, probablemente si eso ocurriera durante diez años se repartirían los títulos. Hamilton se llevaría alguno menos porque, aunque creo que es el más rápido, también es el menos frio, y eso se paga en este deporte. Pero esta pregunta que se hacen muchos, no debe formularse en este deporte, porque como expliqué en el último post, la fórmula 1 no es un deporte unipersonal, es un deporte en el que la ingeniería juega un papel crucial, y eso es lo que lo hace realmente grande.
Tan sólo espero que con este análisis tengan ahora un pensamiento diferente a cerca del dominio de Vettel este año.

3 comentarios:

  1. El hecho de reconocer que perdiste una apuesta de F1 te humaniza, pero el plato fabes que te comiste como resultado de la apuesta te convierte de nuevo en un animal...
    Cuando quieras repetimos, ya sabes que los conocimiento sobre la materia apostada suponen un 70% del triunfo el resto es la audacia del apostante...

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  2. Luis, tambien puedes hacerte las mismas preguntas que planteas sobre Webber al revés sobre Massa (desde ahora en adelante "EL MUELLES"...)...Quiero decir con esto que aunque tú ensalzas bastante a Vettel que está claro que es un grandísimo piloto, tiene el mejor coche y está por encima de su compañero.Lo vimos ayer que cuando estaba a un paso de pillar Button a Vettle, éste apretaba un pelín y hasta luego Lucas.Yo solo espero que el año que viene se igualen los tres grandes lo suficiente para que haya tomate y si luego ya se lo puede llevar Alonso, mejor que mejor

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  3. ...y a todo eso hay que añadir que Webber llegó con una edad muy avanzada a un equipo puntero. Estuvo a la altura, ilusionado y demostró que incluso olvidó ese posible acomodamiento deportivo que a veces todo deportista y humano tiene cuando su posición, su guerra esta ya demasiado descrita. Ahora, con todo un Vettel superdepredador, supermotivado, que desde que llegó a la F1 va dando pasos hacia arriba, Webber con sus 35 primaveras empieza a sentir como la ley de la gravedad le tira para abajo. Su motivación es otra, aunque no tenga un título absoluto, seguro que valora un montón el regalo deportivo que está viviendo dentro de ese pedazo equipo. Así pues, matemáticas y cabeza.

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