martes, 30 de julio de 2013

GP HUNGRÍA - Don Vito y la familia


Fernando Alonso. @ P
Hungaroring es para los pilotos de fórmula 1 lo que los exámenes de junio son para los estudiantes. La cita de Budapest marca el parón veraniego obligado en la fórmula 1 y es que desde hace unos años la FIA obliga a cerrar las fábricas de los equipos en pos del ahorro, ¡qué paradoja! Y ahora, cuando todos deben estar pensando ya en la playa y en el descanso, en Maranello luchan por apagar un incendio que amenaza con llevarse por delante la idílica relación de amor entre Alonso y la Escudería.

Alonso en Hungría 2003. @ L. M. REYES
Hace justo diez años, el asturiano tocaba el cielo en Budapest. Un magnífico fin de semana tanto de él como de su equipo Renault, una parrilla atípica con Raikkonen séptimo y Schumacher octavo,  y la inestimable ayuda de Mark Webber haciendo de tapón tras Alonso dieron al de Oviedo su primera victoria en la fórmula 1. Paradójicamente, Budapest ha supuesto este año una pelea de enamorados entre Alonso y su adorada Ferrari.

Tras cuatro años una amor entre ambos, el asturiano se ha dado cuenta en Hungría que una vez más su lucha por el campeonato parece más una quimera que una empresa con opciones reales. Al asturiano no le faltan razones para pensar que no cuenta en estos momentos con un arma capaz de plantar batalla a los Red Bull, pero no es menos cierto que en su día el eligió pilotar para un equipo particular en muchos aspectos. Cuando escogió decir que no a Red Bull tras su paso por McLaren para esperar por Ferrari, Alonso sabía que iba a ingresar en el equipo más mítico de la fórmula 1. En ningún sitio le podían cuidar y mimar como lo podían hacer en Maranello, pero alguien debería de haberle recordado que la Escudería funciona en parte como una gran familia de la mafia.
Montezemolo. @ CC
Luca Cordero di Montezemolo viene a ser en Ferrari como Vito Corleone en El Padrino de Puzo. Ferrari te lo puede dar todo, pero hay que recordar una cosa, la familia está por encima de todo, incluso de los pilotos. Las declaraciones de Alonso tras la carrera magyar no han gustado nada en Maranello, y su capo se ha encargado ya de poner las cosas en su sitio, ¡el equipo por encima de todo! Realmente no es la primera vez en cuatro años que el asturiano carga contra su coche, aunque es cierto que más de una vez ha sorprendido haciendo equipo y evitando que la prensa metiera cizaña en la formación. Pero lo que sí que ocurre por primera vez, es que en su equipo le tiren de las orejas con un comunicado.

Para los que no se acuerden, les recomiendo que busquen en las hemerotecas y vean como acabó la relación de Alain Prost con Ferrari en 1991. El galo, estrella del momento junto con Ayrton Senna, para mí siempre por detrás del brasileiro, acabó no pudiendo participar en el último gran premio de la temporada en Adelaida al ser despedido tras quejarse de las prestaciones de su Ferrari. Obviamente se supone que de momento las aguas no llegarán al río pero no sería muy recomendable poner a Montezemolo al límite para ver su posible reacción.

Carlos Sainz. @ RB
Para colmo de males, el paddock de Hungaroring se convirtió en un hervidero este fin de semana tras conocerse que Luis García Abad, manager del asturiano, había estado en el motorhome de Red Bull hablando con Cristian Horner, lo que provocó una escalada de especulaciones sobre la marcha del asturiano al equipo austriaco. Personalmente no creo que hay nada en este tema, de hecho parece que Abad fue a hablar de Carlos Sainz Junior, pero el problema viene porque por intereses propios, nadie se ha encargado de desmentirlo, ni Alonso ni Red Bull, al contrario que si ha ocurrido otras veces. Por un lado en Red Bull quieren abaratar la operación de Raikkonen demostrando que pueden tener otra opción de solvencia como sería la de Alonso. Por la otra parte, a Alonso le interesa que vean en Ferrari que su estrella podría dar el portazo para ver si de esta manera acaban de ponerse las pilas. Se supone que un poco de celos puede venir bien siempre en una relación para que la otra pareja te vuelva a dedicar las atenciones que ya no te ofrece. Sin embargo, “Don Vito” se ha encargado de aguar la fiesta a unos y otros. “La familia” no acepta amenazas de nadie ni nada que se le parezca. A “la familia” hay que quererla y respetarla igual siempre, cuando te lo da todo como los cinco mundiales que le dio a Schumacher, o como cuando dejó 20 años seguidos a sus pilotos sin título mundial. Y en este último caso, aunque hay que reconocer que no todos eran joyas del volante, entre esos pilotos tenemos a Gilles Villeneuve, Alain Prost, Didier Pironi, o Nigel Mansell entre otros. Encima, por si fuera poco, Vettel ya ha aportado su grano de arena y ha manifestado que estaría mucho más a gusto como el finlandés que con el español de compañero. Y teniendo en cuenta que va camino de su cuarto mundial, no creo que a Horner se le pase por la cabeza incordiar a su pupilo. Al final, Red Bull pasará por caja para hacerse con Raikkonen, y Alonso afrontará la temporada de los grandes cambios al volante de los coches de Maranello por quinto año consecutivo.

 

Lewis Hamilton. @ MB
Mientras tanto, en Inglaterra, Lewis Hamilton estará preguntándose porque la prensa especializada no se habla de su gran triunfo en Hungría y si lo hacen de lo que no va a pasar entre Alonso, Ferrari y Red Bull. Como diría un amigo, estas son las particularidades de la fórmula 1. Justo el equipo que no pudo acudir a los test de los jóvenes se llevó el premio gordo en Budapest demostrando que aún hay que contar con ellos para los podios que restan. Lástima que la temporada esté ya tan avanzada, porque a mi entender, solo una catástrofe en Red Bull puede impedir al alemán llevarse su cuarto cetro. Y es una pena, porque con Raikkonen, Alonso y Hamilton en un pañuelo, podíamos ver un final de campeonato de infarto pero, o mucho me equivoco, o los tres han perdido ya el tren del 2013. En breve todos empezarán a soñar con ser grandes de nuevo con los minimotores turbo del 2014, pero señores, esa será otra historia que contar.


lunes, 8 de julio de 2013

GP ALEMANIA - El heredero


Podio del GP de Alemania. @ P
Hay ocasiones en las que el forofismo nos aleja claramente de la realidad. Ocurre en todos los aspectos de la vida, pero en grado superlativo cuando nos adentramos en el deporte. Si además ese forofismo está motivado por alguien de tu mismo país o región, entonces las consecuencias pueden ser incalculables. La trayectoria de Sebastian Vettel en la fórmula uno puede calificarse como impecable y de auténtico récord. Cuando aún tenemos en la retina al Kaiser Schumacher, este joven alemán de 26 años va camino de adjudicarse este año su cuarto título mundial. De ser así, alcanzará el tercer mejor registro de la historia (el de Alain Prost) cuando aún no ha llegado al ecuador de su carrera en el Gran Circo.

Sebastian Vettel. @ RBR
Tras terminar la cita alemana, me llamaba un amigo un poco alucinado con la carrera del germano, y no es para menos. Aunque es difícil fijarse en sus cronos y en su pilotaje cuando tenemos a un paisano corriendo en Ferrari, lo cierto es que si uno analiza los números de Vettel realmente meten miedo a cualquiera. Si miramos las victorias en grandes premios, Vettel es sexto con 30 con Mansell (31), Alonso (32), Senna (41), Prost (51) y Schumacher (91) por delante, pero si contabilizamos el porcentaje de victorias por grandes premios disputados, nos encontramos que solo el Kaiser le adelanta con un 29,64 % por el 27,27 % de Vettel. Alonso por ejemplo se queda con un 15,53 %. Cualquier clasificación que analicemos con los pilotos actuales tiene a Vettel encumbrado en lo más alto, como la de poles, donde sus 39 poles con un 35,45 % se acercan cada vez más a las 65 de Senna con un 40,37 % de efectividad. Tan solo en la de vueltas rápidas tenemos al “enfant terrible” de la F-1 actual, el gran Kimi Raikkonen, quien atesora 38 vueltas rápidas en carrera, y que además ostenta la mejor racha de carreras seguidas en los puntos con 26 grandes premios.

Pero los números son solo eso, números, y aunque este sea un deporte para ingenieros y matemáticos, sigue habiendo gente para la que pesa más el corazón que la cabeza. Y si no que se lo digan a nuestro Fernando Alonso. Ayer declaraba estar muy orgulloso de pertenecer al equipo de Maranello aunque no haya ganado aun un título mundial con ellos y este sea el cuarto año. Efectivamente, ser piloto de Ferrari es algo que está al alcance de muy pocos. Igual que en los 90 suponía pilotar un Lancia en el mundial de Rallyes. ¿Se acuerdan de Carlos Sainz? Él se quedó con dos títulos mundiales cuando debía haber tenido tres o cuatro, pero no eligió bien sus equipos. ¿Saben quién dijo NO a Red Bull en 2009?, pues Fernando Alonso. Esperemos que en su caso no le ocurra como a Sainz y pueda sumar algún título más con Ferrari.

Ecclestone, Lauda y Hembery. @ P
Pero volvamos a la actualidad. Tras una semana de comunicados de Pirelli, los italianos han conseguido que ningún coche reventase sus neumáticos en Alemania. ¡Todo un logro! Eso sí, por el medio cargaron contra los equipos por no saber utilizar sus gomas o por hacer un uso agresivo de ellas. Por favor, señores de Pirelli, esto es fórmula 1, y aquí se lleva todo al límite, hasta los neumáticos. O al menos así era hasta que la FIA empezó a introducir las medidas de ahorro con los motores y las cajas de cambio. Ayer vimos como el motor del Marussia de Jules Bianchi rompía e incluso se encendía. Algo inédito en los tiempos que corren. Por cierto, conociendo a Jean Todt, es posible que obligue a los pilotos a llevar unos calzos como los de los camiones dentro del monoplaza para frenar el coche cuando lo paren en una cuesta…

Romain Grosjean. @ P
Lewis Hamilton. @ MB
Y retomando el forofismo del inicio, parece que cada vez que los neutrales comentaristas de Antena 3 demonizan a un piloto este se crece y acaba siendo una joya. Acordémonos de los tiempos en los que Lewis Hamilton tenía rabo y olía a azufre. Pues uno de los últimos en recibir las duras críticas de la prensa española fue Romain Grosjean, y miren que carrera firmó ayer y que temporada está haciendo con dos podios incluidos. La fórmula 1 es muchas veces ingrata porque acaba poniendo a cada uno en su sitio. Y si no que se lo digan al propio Hamilton. Da igual que se empeñe en hacer poles los sábados, y que sea el más rápido a una vuelta, porque su Mercedes ya se encarga de aguarle la fiesta el domingo. Realmente es una pena que no podamos ver al británico pelear de tú a tú con sus rivales en carrera, o al menos mientras que en la pista siga habiendo una temperatura por encima de 40 grados. De todas formas los súper Pirelli de esta temporada se han acabado ya, y a partir de Hungría habrá un collage entre las carcasas de kevlar del 2012 y los compuestos del 2013. El resultado es difícil de adivinar, pero me da que no va a haber muchos cambios en las clasificaciones. Eso sí, el cambio siempre nos podrá servir para hacer gala de ese forofismo y echar la culpa a las gomas en lugar de contra los ingenieros que crean y desarrollan el monoplaza, pero amigos, eso también es fórmula 1.


martes, 2 de julio de 2013

GP GRAN BRETAÑA - Los picapiedra


Webber, Rosberg y Alonso. @ RBR
Cuantas veces les habrá pasado a ustedes que preferirían haberse quedado cómodamente calentitos en la cama en lugar de haber acudido a una odiosa jornada de trabajo, a un desastroso examen cuando estudiaban, o algún acto que haya cambiado sus vidas, dígase por ejemplo una boda. Pues bien, algo así deben estar pensando en Pirelli Paul Hembery y sus chicos por el día en el que decidieron embarcarse en la fórmula 1. ¡Y mira que a priori lo tenían fácil!

Tras la hecatombe de Michelin en Indianápolis 2005 parecía imposible que un fabricante de neumáticos volviera a hacer el ridículo en el gran circo de igual forma que los franceses cuando consiguieron que solo hubiera seis monoplazas en un gran premio. Sin embargo, en Pirelli han conseguido al menos igualar la gesta con los reventones de neumáticos de este fin de semana en Silverstone. En los 63 años que llevamos de fórmula 1 moderna, tan solo en 19 temporadas ha habido un fabricante de neumáticos exclusivo. Pirelli heredó la hegemonía de Bridgestone que campó cuatro años a sus anchas tras la retirada de Michelin. De hecho, la exclusividad no fue solo algo que pidieron los italianos para entrar en la F-1, si no que el propio Bernie Ecclestone impuso de alguna forma el monopolio para tratar de conseguir que todo discurriera como en una copa monomarca, y que no se volvieran a dar en pista los problemas de que unos equipos fueran bien con un fabricante mientras que los otros rodaran a dos segundos por vuelta por culpa de montar unas gomas diferentes.

Las gomas de Silverstone. @ P
Con la entrada de Pirelli hace tres años todos jugaron a ser gurús de los neumáticos. Tanto los jefes de equipo, como la FIA con Jean Todt a la cabeza, y el mismísimo Bernie, pidieron a Pirelli unas gomas que alegraran el campeonato. Y tal y como se suele decir en España que los experimentos a veces es mejor hacerlos con gaseosa, en Italia deberían haber sido con Lambrusco, pero no, utilizaron gasolina y ya se sabe lo que ocurrió. Primero consiguieron fabricar unas gomas de las que fuese imposible predecir su comportamiento. Con una ventana de uso por temperatura muy estrecha volvieron locos a pilotos e ingenieros, y cuando parecía que la gente le iba tomando el tranquillo a las Pirelli, de pronto los neumáticos empiezan a perder las láminas de goma como le ocurrió a Hamilton en Bahrein.

Los italianos tratan de coger el toro por los cuernos tras estos problemas pero reciben una buena cornada. Organizan unos test privados con Mercedes, similares a los dos que hicieron previamente con Ferrari, aunque en Maranello no fueran tan listos como los de Brackley y no usaran a sus pilotos “pata negra”, y consiguieron liarla parda. Cruce de acusaciones ya conocido por todos, visita a la Plaza de la Concordia en Paris para presentarse ante la FIA, y sanción absurda e innecesaria para acallar a los revolucionarios de Red Bull, Ferrari y Lotus. Y cuando todo parecía que se iba a acabar, consiguen entrar de nuevo en el ojo del huracán al ver como sus gomas empiezan a desintegrarse en Silverstone.

Alonso en Silverstone. @ P
Si uno analiza fríamente el problema, lo normal es que no se corriera esta semana en Nurburgring, pero a Bernie le podría dar un ataque al corazón si algo así sucediese. Con los camiones de Pirelli camino a la mítica pista germana, parece imposible encontrar soluciones. A mi realmente se me ocurren un par de ellas sencillas. Por un lado mandar de inmediato a Alemania una docena de patrullas de la Guardia Civil y repartirlas por los el circuito alemán con sus radares última generación y unas cuantas señales de limitación a 120 kilómetros por hora. Así las gomas no sufrirían y no volveríamos a ver un neumático desintegrándose. Seguro que alguno que conozco en el cuerpo se apuntaba voluntario. La otra, mucho más costosa pero igual de efectiva, que pongan a trabajar a las canteras que cerraron en Italia y España con el estallido de la burbuja inmobiliaria y que les preparen unos neumáticos al estilo de los Picapiedra para evitar pinchazos. Unas buenas ruedas de canto rodado pueden hacer maravillas.

Y ya en serio, lo cierto es que el problema que tienen ante sí la FIA, los equipos, Pirelli y Bernie es de órdago. El miércoles volverán a citarse todos en Paris en la Concordia, pero las soluciones se antojan complejas. Lo único que tendrán a favor es que, afortunadamente para todos, Nurburgring no es un circuito exigente con las gomas como Silverstone porque no tiene zonas en las que las gomas sufran tanto. De esta forma luego habría tres semanas más hasta Budapest, y si tendrían tiempo de reacción para un apaño, y aunque no se diseñe un neumático nuevo en ese tiempo, si se podría volver a los del 2012 como ha propuesto Christian Horner, por ejemplo.

El equipo Mercedes celebra el triunfo. @ MB
Y con respecto a la carrera inglesa poco que decir que no se haya dicho ya. Una vez que los Pirelli marcaron el desarrollo de la carrera con el reventón de Hamilton, vimos como el Red Bull también se avería, y como en Ferrari siguen sin conseguir un coche decente para la calificación, mientras que el punto flaco de otros años de las estrategias parece más que solucionado con estrategias tan brillantes como la de entrar por tercera vez con el último safety car cuando algunos echaban las manos a la cabeza, y en cuanto al ritmo en carrera siguen contando con uno de los mejores coches de la parrilla. En Mercedes siguen con su progresión al alza, y en cuanto al campeonato, con el abandono de Vettel el resto respira, y volvemos a tener a los dos Red Bull, los dos Mercedes y a Alonso y a Kimi con opciones aun de plantar batalla por el campeonato. Qué pena que no siguieran el resto del certamen con los coches de los Picapiedra, no me digan que no sería divertido, ¿verdad?