lunes, 27 de mayo de 2013

GP MÓNACO - Cuestión de vacunas

Vettel, Rosberg, y Webber. @ P
Desde que en 1796 Edward Jenner descubre la vacuna contra la viruela, los avances en la biomedicina han sido sorprendentes. El principio, utilizado sin conocimiento muchos siglos antes en China, consistía en inocular antígenos que provocasen la producción de anticuerpos por el organismo que permitiesen cierta inmunidad contra la enfermedad, en el caso de Jenner la viruela. Esta enfermedad causaba estragos por aquel entonces en Europa, y la vacuna de Jenner dotó a los médicos de un arma infalible para luchar contra ella. En algo así se debió inspirar Ross Brawn en Mónaco para preparar a sus pupilos. Tras el desastre de las últimas carreras, sobre todo en Montmeló, en Mercedes sabían que hacer la pole no era suficiente para plantar cara a los Red Bull, los Ferrari y los Lotus. Hacía falta algo más, algo que evitase los desastrosos resultados que las Pirelli provocan este año en sus monoplazas, hacía falta una auténtica vacuna. Y la encontraron, su nombre, Mónaco. Un circuito capaz de romper con cualquier patrón preestablecido en el Gran Circo.

En 1992, la enfermedad a batir se llamaba Williams Renault. Aquella máquina infernal diseñada por Patrick Head y Adrian Newey era letal en las manos de Nigel Mansell. Iniciaron la temporada encadenando cinco victorias consecutivas. Parecía que iban a arrasar en todas las carreras. Sin embargo, cuando llegaron a la sexta cita, un brasileño que solo había puntuado en dos carreras ese año les bajó de la nube, era Ayrton Senna y el circuito, como no, Mónaco.

Mónaco. @ RBR
Las calles del Principado son la auténtica vacuna de la fórmula 1. Lo mismo les da que tengan que luchar contra una máquina prodigiosa como el FW14 del 92, o contra las Pirelli del 2013. En Mónaco lo que haya pasado en el resto de la temporada no cuenta. Tras la calificación del sábado algunos podían pensar que la pole de Rosberg podía volver a ser pan para hoy y hambre para mañana, pero el alemán, afincado en el Principado, y sobre todo su jefe Ross Brawn, sabían que no iba a ser así.

Nico Rosberg. @ MB
Los Ferrari y los Lotus que han dominado en lo que va de campaña no estaban invitados a la fiesta en el puerto. Aquí no vale pasar de puntillas el sábado y batirse el cobre el domingo, en Mónaco las batallas se libran en la calificación, y ahí es donde ahora brillan las balas plateadas de Brackley con luz propia. Una auténtica proeza la de Nico Rosberg ganando en un circuito en el que lo hizo su padre hace 30 años. Por cierto, un poco vergonzoso tratar de cargar ahora contra Mercedes por su pruebas con Pirelli en Montmeló cuando la firma italiana se lo ofreció a todos los equipos y la mayoría, o no respondieron o dijeron que no, todo un despropósito

Los Mercedes por delante de los Red Bull. @ MB
El estrecho circuito y el lento ritmo inicial hicieron el resto en carrera. No es que me guste una carrera lenta como la que hemos visto en Mónaco, de hecho siempre digo que la filosofía de este deporte debe ser siempre la velocidad. Pero sigue sin haber una carrera en todo el campeonato como esta. Con los modernos circuitos de Hermann Tilke y sus escapatorias kilométricas los errores de pilotaje ya casi no cuentan en el desarrollo de una carrera. En Mónaco un error supone irse caminando para el box. Y si no que se lo digan a Felipe Massa. El brasileño se empeñó en probar la resistencia de las vallas y protecciones de Santa Devota. Su conclusión fue clara, son resistentes.

Bromas aparte, este gran premio nos ha dejado una cosa muy clara, Ferrari y Lotus no son lo mismo cuando las Pirelli no son claves en el desarrollo de la carrera. Entonces, ¿qué va a pasar en Canada o Silverstone cuando modifiquen los actuales neumáticos? Pues puede ser que tengamos un campeonato mucho más interesante que el de ahora. Aunque el cambio no va a ser tan grande como lo había previsto la gente de Paul Hembery debido a las protestas de la mayoría de equipos, lo cierto es que es posible que las fuerzas se igualen.

Con respecto a la carrera mencionar un par de cosas. Por un lado la mala suerte de Hamilton, quien sin comerlo ni beberlo se vio relegado de la segunda a la cuarta plaza debido a la entrada del safety car. Y por otro, analizar un poco los incidentes y adelantamientos en carrera. De los tres adelantamientos que hace Sergio Pérez a la salida del túnel, creo firmemente tras visionar de nuevo cada uno de ellos que solo es punible su acción contra Raikkonen.

Fernando Alonso. @ P
El apurada de frenada es la misma con Button y con Alonso, pero mientras que el inglés entiende que ha perdido la posición y permite el adelantamiento, el asturiano no cede y no le queda más remedio que saltarse la chicane. De esta forma la sanción a Alonso obligándole a ceder la posición tras la suspensión es más que lógica. Tan solo en el intento de adelantamiento a Kimi es cuando Pérez se pasa de listo intentando entrar en un hueco que no existe por la buena defensa del finlandés. No hay que confundir los términos locura, pilotaje y agresividad. Los dos últimos son los que deben denominar un piloto de fórmula 1, el primero lo dejamos para los porteros de balonmano. Pérez demostró en Mónaco que tiene madera de piloto, igual que lo hizo Sutil, mientras que Alonso fue para mí demasiado conservador. Esta vez fue el fiel reflejo de Alain Prost con su calculadora en la mano. Esto no es que sea malo, no hay que olvidar que el galo ganó cuatro campeonatos, pero no es lo que más gusta a la afición, o al menos a los que nos gusta la fórmula 1 por encima de todo. Su cero en Malasia y sus cuatro puntos en Barhein pesan mucho, y en Mónaco le hicieron abrir demasiadas puertas evitando cualquier tipo de toque. Puede ser que al final de temporada se alegre de los puntos obtenidos en el Principado, pero también puede ser que se arrepienta de los que perdió aquí. Habrá que esperar.

Por cierto, que la remontada de Raikkonen tras tener que entrar al box por el incidente con Pérez a falta de siete vueltas fue gloriosa. Además, le permite continuar con su racha de 23 carreras seguidas puntuando igualando la marca de Alonso y situándose a una de la de Schumacher. ¿Alguien encontrará la vacuna contra la regularidad del finalandés?, me temo que no, aunque también me temo que no será suficiente para ser campeón en Brasil.

2 comentarios:

  1. Yo tengo claro desde hace unas temporadas que la carrera de Mónaco es la mas coñazo de toda la temporada, y el domingo mis escasas dudas desaparecieron...Por lo menos Alonso salvó unos puntinos...
    Por cierto, he estrenado blog:
    http://mtbxmushing.wordpress.com/

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  2. Coincido, una carrera coñazo, pero por fin abandonos por golpes, los echaba de menos, esas escapatorias kilometricas no me gustan...
    Chus Reyes

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